La renunciación es el sabio sendero hollado por el devoto que voluntariamente abandona metas inferiores en pos de logros superiores y que para alcanzar los gozos eternos prescinde de los placeres pasajeros de los sentidos .
La renunciación no constituye un fin en si misma, sino que despeja el terreno para que las cualidades del alma se pongan de manifiesto. No temas los rigores de la abnegación: las bendiciones espirituales que se derivan de ella son inmensas e incomparables Paramahansa Yogananda Diario Espiritual Dia 7 Febrero
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